Los celos… Mantener una relación sana y constructiva

Los celos… Mantener una relación sana y constructiva

celosLos celos sanos consisten en una preocupación por la posible pérdida de una persona querida o malestar por la relación real o imaginada que esa persona tiene con alguien más.

Quienes sienten este tipo de celos prefieren que sus parejas permanezcan con ellos y no desean que tengan una relación demasiado íntima con nadie más. Esto a veces causa algunos problemas en la pareja pero no son demasiado serios ni producen un malestar intenso a ninguno de los miembros de la pareja.

Por el contrario, los celos patológicos están acompañados de intensos sentimientos de inseguridad, auto-compasión, hostilidad y depresión y suelen ser destructivos para la relación.

La diferencia entre ambos tipos de celos está en que en vez de preferir y desear que su pareja esté sólo con él o ella, las personas con celos patológicos, están exigiendo o demandando que su pareja no debe, bajo ningún concepto, implicarse emocional o sexualmente con otras personas. Al estar utilizando un pensamiento rígido, basado en exigencias absolutistas que no admiten más posibilidad que el cumplimiento de sus deseos, estas personas perciben la posibilidad de una infidelidad como algo terrible (siempre que exijas que algo tiene que ser como tú quieres que sea, en vez de solamente preferirlo, considerarás horrible la mera posibilidad de que no sea así). De este modo, vigilará cada gesto inocente de su pareja hacia otra persona para tratar de prevenir e impedir que llegue a suceder eso que considera tan terrible e insoportable.

En cambio, cuando una persona utiliza un pensamiento flexible, se dice a sí misma cosas como «Deseo que mi pareja esté sólo conmigo, pero es libre de elegir lo que quiere, y si me deja será doloroso y frustrante pero no será algo terrible, ni insoportable». La persona que piensa de este modo puede estar preocupada, pero no aterrorizada ante la posibilidad del abandono, ni necesitará estar constantemente en guardia por si sucede eso tan temido. En cambio, si está utilizando un pensamiento rígido y dogmático, creerá cosas como: «Mi pareja no puede ni debe dejarme nunca bajo ninguna circunstancia ni tiene derecho a hacerlo porque si lo hace me sentiré fatal y será terrible e insoportable».

La persona que piensa de este modo se sentirá muy ansiosa, insegura, triste, agresiva y dependiente.

Por ejemplo, quien piensa que su valor personal depende de que su pareja permanezca con él o ella, está creando una relación de dependencia que lo mantendrá continuamente ansioso pensando en lo horrible y humillante que sería que su pareja lo dejara; mientras que si piensa que su valor como persona no tiene nada que ver con eso (es decir, utiliza un pensamiento más realista) entonces se sentirá más relajado en su relación con su pareja.

Los sentimientos de hostilidad provienen de creencias como: «si mi pareja me deja sufriré; por tanto, no puede dejarme y si lo hace es una persona horrible que merece el castigo». De este modo se ven con derecho a llegar incluso a la violencia. Es decir, quien piensa así, considera que sus deseos son órdenes para los demás y antepone sus propios deseos y bienestar al de su pareja: «como a mí me dolería mucho que me dejaras, no eres libre para hacerlo».

Entre estas creencias irracionales se encuentran las siguientes:

1. La pareja que yo he elegido debe quererme y demostrármelo en todo momento mientras yo quiera que sea así.

2. Es terrible que lo que siento no sea correspondido (como tiene que ser) y eso hace que mi vida sea horrible.

3. No puedo soportar que mi pareja no me quiera tanto como yo a ella/él.

4. Dado que no he logrado que mi pareja me quiera como tendría que haber hecho, la relación va fatal, se terminará dentro de poco.

5. Si mi pareja me deja, nunca encontraré a nadie a quien querer y seré infeliz durante mucho tiempo.

6. Tengo que estar absolutamente seguro/a en todo momento de que mi pareja me quiere.

7. Si mi pareja me es infiel, los demás se reirán de mí y pensarán que soy un idiota, eso no podría soportarlo.

¿Celos o miedo a estar sólo?

La soledad provoca angustia. El miedo de perder a la persona amada se une al pánico que sufre la mayoría de las personas a estar solo. Darse cuenta que uno no es irremplazable, es duro, pero mucho más en cuanto es mayor el temor a la soledad.

Por este motivo, el perfil psicológico de la persona que siente celos se relaciona con la baja autoestima y la inseguridad. Estas personas, además de tener reacciones emocionales negativas, tienen necesidades de estimación y demanda continua de aprobación.

Os dejo con unas preguntas para que podáis trabajar este terreno 🙂

• ¿Qué tipo de celos sientes?

• ¿Cuáles son los pensamientos que tienes cuando comienzas a sentirlos?

• ¿Tienes miedo a estar solo?