Una vida
Que mi modo de vivir vaya acorde a mis valores y a mis principios. Sin renunciar a quién soy ni a...
Que mi modo de vivir vaya acorde a mis valores y a mis principios. Sin renunciar a quién soy ni a...
He aprendido que el amor, aunque sea verdadero, puede doler y mucho; que no por el hecho de que haya amor quiere decir que tengamos que estar juntos, al igual que el amor puede llegar por sorpresa o terminar en una noche… o incluso que sin un motivo, se puede acabar…
He aprendido que amar no significa olvidarme de mí mismo y darlo todo, sino que también tengo que poner límites, pues el amor sin respeto no es amor, es dolor (y continuo).
No me interesa lo que hagas para vivir, quiero saber lo que ansías y si te atreves a soñar con lo que desea tu corazón.
No me importa la edad que tengas, quiero saber si te arriesgas buscando como un loco el amor, los sueños y la aventura de estar vivo.
No me interesa saber todas las posesiones que tienes, quiero saber si has tocado el corazón de tu propio dolor, si te han abierto las traiciones de la vida o si te has cerrado a vivir por el miedo a más dolor.
“Contra el miedo sólo existe un antídoto: la acción.
Podemos hablar del precipicio, reflexionar sobre él o medirlo, pero al final, lo que cuenta es saltarlo. Es decir, ACTUAR.
El miedo siempre muere ante la acción. Si lo piensas, no se puede tener miedo a lo ya realizado. El miedo se tiene sólo a lo que está por realizar, y realizarlo, por tanto, es eliminarlo.